Enfermedades de la glandula prostatica en perros

La famosa próstata es un órgano glandular que, en los machos de nuestras mascotas rodea el cuello de la vejiga. Tiene varias funciones como colaborar en contener la emisión de orina ( micción ) y el semen ( eyaculacion ) además de producir y secretar el liquido prostático, importante componente del esperma, que contribuye con sus elementos y ph levemente alcalino a contrarrestar la acidez de la secreción vaginal de la hembra, a fin de  facilitar el movimiento, prolongar la vida útil y efectividad de los espermatozoides.

La enfermedad prostática es frecuente en los machos caninos y muy rara en felinos, afectando tanto machos enteros como castrados, siendo los primeros, con mayor carga hormonal, los mas perjudicados por alteraciones infecciosas e inflamatorias. Si bien la  castración temprana es un mecanismo que reduce algunas patologías, no los exceptúa de sufrir tumores, por lo que es aconsejable hacer estudios preventivos periódicos en todos los machos adultos.

El paso de los años, hace al órgano más vulnerable a las enfermedades debido a que se reduce la producción de líquido con propiedades antibacterianas y aumenta tanto su tamaño como su sensibilidad a las hormonas secretadas por los testículos.

En la clínica observamos frecuentemente los cambios producidos al multiplicarse anormalmente sus componentes  ( hiperplasia benigna) , alteraciones de sus tejidos (metaplasia ), quistes, abscesos, cálculos y tumores. Su relación de continuidad con las vías urinarias y reproductivas la hace blanco de agentes infecciosos que pueden colonizarla a través de ellas. Al poder coexistir diferentes patologías al mismo tiempo, su evaluación, control y tratamiento requieren un estudio atento.

Las enfermedades prostáticas generalmente cursan con incomodidad y dolor, su ubicación anatómica, sobre la cavidad pelviana, envolviendo uretra y  cuello de la vejiga, debajo del intestino grueso, la relaciona con los síntomas que pueden observarse. El aumento de tamaño y sus alteraciones se manifestaran con una micción y defecación dolorosa o difícil (disuria, tenesmo, constipación ), secreciones uretrales purulentas o hemorrágicas, decaimiento, falta de apetito e inmovilidad, dolor en zona lumbar, mal estado gral. o alteración en la función y movilidad de miembros posteriores.

Gracias a la ayuda de estudios complementarios como la ecografía, radiografía y el laboratorio,  podemos aproximarnos a un diagnostico con un manejo cuidadoso, métodos no cruentos y sin incomodar a nuestros animales. La detección de o los cambios que se presenten definirán los estudios y el mejor tratamiento medico o quirúrgico a seguir, de acuerdo a la idiosincrasia de cada paciente. Los controles periódicos permiten prevenir e instaurar terapias correctivas brindando calidad de vida y bienestar a nuestros "viejos machos".

Disfrutémoslos responsablemente. Hasta la próxima.

Agradecemos la colaboración para la publicación de esta nota a : M.V. Mario Miani - C. Onelli 1460 - Local 8 - Centro Administrativo Bariloche
Bariloche - Río Negro - Argentina - TE: 54 - 02944 - 43 - 1721 - 

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