Mi perro se come la comida del gato

Dr. mi perro se come la comida del gato - ¿Es seguro para los perros comer la comida para gatos? - Los gatos y los perros tienen diferentes necesidades dietéticas y deben comer alimentos específicos para su especie.

La mayoría de los alimentos para gatos suelen ser más caros que la mayoría de los alimentos para perros, por lo que la mayoría de los dueños de perros por razones económicas solos prefieren alimentar a su perro con su propia comida. Pero tal vez estés teniendo el mismo problema que mucha gente, los perros siempre encuentran la forma de acceder a la comida de los gatos que viven con ellos. Es posible que se pregunte si está bien que su perro se deleite con la comida de su gato. En resumen, la respuesta es NO


¿Qué diferencias hay entre la comida para caninos y felinos?

Técnicamente y evolutivamente, los gatos son carnívoros obligados que necesitan comer carne como su principal fuente de alimento. Los perros, por otro lado, son omnívoros que comen tanto alimentos a base de carne como alimentos de origen vegetal para satisfacer sus necesidades nutricionales. En términos generales, la dieta canina generalmente contiene más fibra que un régimen estrictamente carnívoro. 

Aunque los alimentos para perros y gatos pueden parecer similares a primera vista, existen algunas diferencias significativas. Los alimentos para gatos generalmente contienen más proteínas que los alimentos para perros, y también contienen mayores cantidades de grasa. La Asociación de Oficiales de Control de Alimentos de Estados Unidos (AAFCO) recomienda un mínimo de 5 % de grasa para alimentos para perros y 9 % grasa para gatos, de acuerdo con la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA).

¿Qué consecuencias tienen los perros comiendo comida para gatos?

Aunque estas diferencias en la dieta pueden no parecen tan importantes, los porcentajes más altos de proteínas y grasas significan más calorías para su perro para la porción del mismo tamaño de comida para gatos. Estas dietas felinas más ricas pueden conducir al aumento de peso e incluso a la obesidad si se consumen durante largos períodos de tiempo.

Además, como el sistema gastrointestinal de un perro no está diseñado para digerir alimentos con altos niveles de grasa, la comida para gatos puede alterar el estómago y provocar vómitos y diarrea. Demasiada grasa puede afectar negativamente el páncreas de tu perro, lo que llevaría a la pancreatitis, que al menos puede afectar la eficiencia de su digestión y, en el peor de los casos, tener consecuencias graves para la salud. 

Algunos de los alimentos para gatos más nuevos contienen un equilibrio inadecuado de vitaminas y minerales para su perro, y esto puede conducir a deficiencias o excesos de estos ingredientes. Como ejemplo, la comida para gatos típicamente contiene menos zinc y vitamina E, que la comida para perros. La comida para gatos también generalmente contiene taurina agregada, algo que los perros no necesitan en su dieta. Estas diferencias nutricionales pueden afectar la salud general de su perro durante un largo período de tiempo.


La comida para gatos es más rica y puede hacer que su perro tenga sobrepeso u obesidad.  

Los perros también necesitan más carbohidratos que los gatos y, a menudo, no obtendrán la energía que necesitan sin estos ingredientes en sus alimentos. Los perros pueden consumir una dieta que contenga casi un 50 % de carbohidratos para darles energía, mientras que el gato obtiene la mayoría de su energía de las grasas.

El mayor contenido proteico de la mayoría de los alimentos para gatos puede representar una amenaza metabólica para un perro más viejo, especialmente uno que tiene enfermedad renal, enfermedad hepática o diabetes. Se debe alimentar a los perritos mayores con un alimento adecuado específico para perros o se debe administrar una dieta específica para perros a los perros con problemas médicos.

Una pregunta freceunte es: "¿Es malo para mi perro si ocasionalmente tiene algo de comida para gatos como bocadillo?" Esto no debería ser peor que si tu gato tuviese alguna galleta para perros ocasionalmente. Sin embargo, para una salud óptima de las mascotas, no es recomendable incorporar la comida de una mascota en la dieta de su otra mascota, y en su lugar, hacer todo lo posible para alimentar a cada especie con la dieta específica para cada especie. Entonces, en lo que respecta a los perros, idealmente es recomendable alimentar a su cachorro con alimentos para perros para evitar problemas de salud.

¿Los gatos pueden comer comida para perros?

Los alimentos para perros han sido y son deficientes en taurina, un aminoácido esencial requerido por los gatos que no se encuentran en algunos alimentos para perros o que no están en niveles adecuados para los felinos. El ácido araquidónico, un ácido graso que los gatos necesitan, a menudo no se encuentra en la comida para perros. Otras necesidades nutricionales únicas de los gatos es porque no pueden sintetizar suficiente niacina, arginina y vitamina A, junto con el ácido araquidónico o taurina, y necesitan cinco veces más tiamina que los perros. Además, la comida de tu perro generalmente contiene más fibra, y esto también puede alterar el tracto gastrointestinal de tu gato.

Algunas sugerencias para evitar que sus mascotas coman la comida de los demás

A veces, la tentación de la comida de tu gato puede ser difícil para tu perro. Para evitar que su perro coma la comida de su gato: 

- Alimente a su gato en una habitación separada a la que su perro no tenga acceso, por ejemplo, alimente al perro en la cocina y al gato en la lavandería.

- Separe el área de alimentación del gato del resto de la casa con una puerta por la cual el perro no pueda saltar o gatear.

- Alimenta a tu gato en un estante o mostrador alto.


Si estas técnicas no logran alejar a tu perro, considere obtener una caja o caja del tamaño de un gato en la que el perro NO pueda entrar, y alimente a su gato dentro de esa caja. Finalmente, si todo lo demás falla, instale una puerta para mascotas en una habitación separada, como el lavadero, que es demasiado pequeña para que su perro la use o que se active con un control remoto en el cuello de su gato. Cierre la puerta para negarle a su perro el acceso a la comida para gatos y controle la ingesta de ambos para asegurarse de que cada mascota coma su propia comida.

La mayoría de las veces, los caninos comedores de comida para gatos tienden a tener sobrepeso y a menudo pueden sufrir más dolencias gastrointestinales debido a que comen la comida para gatos más rica. La diarrea, los vómitos y la pancreatitis, que pueden poner en peligro la vida, son todos los resultados posibles para la alimentación a los perros a corto o largo plazo de la comida para gatos. La comida para gatos, que generalmente tiene niveles de proteína y grasa aún más alto, es aún menos apropiada para los perros. Y, nuevamente, los perros más viejos y aquellos con condiciones médicas establecidas pueden verse aún más adversamente afectados por los niveles más altos de proteína y grasa del gato y especialmente de los alimentos para gatos. 

En muchas tiendas para mascotas o Pet shop y veterinarias de barrio, los alimentos comerciales para perros y los alimentos para gatos están etiquetados y se venden por separado por una razón. No deberíamos alimentar a nuestros perros con comida para gatos, y definitivamente no deberíamos alimentar a su gato con comida para perros. Es posible que un perro pueda comer alguna comida para gatos como refrigerio en ocasiones o que incluso le robe una comida al gato, pero esto no es algo que deba ser de manera regular o constante, debido a los posibles problemas de salud que puede provocar. 

S.E.C. (Servicio de educación al consumidor) 




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