Nefroproteccion en perros y gatos una decision de cuidado

Frente al diagnóstico de enfermedad renal o alguna otra patología que, a la larga, va a terminar incidiendo en el aparato urinario, debemos y podemos tomar la decisión de llevar adelante un manejo terapéutico - Nefroprotección - que retrase el progreso de la enfermedad, mejore la calidad de vida, y aumente la supervivencia.

Pero antes de poner en práctica el tratamiento, debemos estadificar al paciente según IRIS (International Renal Interest Society), esta clasificación consta de 3 parámetros a saber del perro o el gato que vamos a tratar.

1) Valor de la creatinina sérica, en tres tomas, con el paciente bien hidratado.

2) Valor de proteinuria, en 3 oportunidades, separadas por 15 días.

3) Valor de presión sanguínea sistémica, en 3 oportunidades (en el mismo día separada por 1 hora o cada 7 días).

La Nefroprotección  en caninos y felinos se lleva adelante en todas las etapas renales, pero es necesario, estadificar siempre, para poder tener en claro desde donde se parte con el paciente y hablarlo con el dueño. El punto de partida de nuestro tratamiento va a determinar el pronóstico y cuanto va a ser el compromiso del dueño.


Como médicos veterinarios debemos:

1) Introducir al dueño en la enfermedad y en el manejo educándolo.- 

2) Establecer un plan de monitoreo consensuado.- 

3) Hablar de los costos del tratamiento para ajustarlo en base a las posibilidades económicas de la familia de la mascota.-


Es importante comprender que trabajamos tanto para el perro o el gato como para el dueño. Si el tratamiento propuesto es demasiado comprometedor para la familia de la mascota, involucra demasiado tiempo o es demasiado caro o podría afectar la relación entre la mascota y el dueño, es improbable que el tratamiento sea exitoso a través del tiempo.

En base a lo dicho, el veterinario debe explicar que se va a hacer y por qué, planificar controles, ya sea telefónico o personal para los monitoreos.


¿A quiénes implementarles un tratamiento de Nefroprotección?

- Pacientes en etapa renal I con lesiones estructurales renales incidentales por ecografía.

- Pacientes en etapa renal I, que presentan una orina con densidad baja de manera constante.

- Pacientes que presenten patologías no renales que pueden impactar, con el tiempo en los riñones.

- Gatos que hayan presentado algún episodio de alteración de las vías urinarias bajas.

- Perros y gatos en etapas renales II, III, IV.

- Perros y gatos proteinúricos en cualquier etapa renal.

 

Plan de protección renal

- Dieta Húmeda:

Permite que no se instalen, en el paciente, estados de deshidratación crónicos que sostendrán un proceso prerrenal, poniendo en riesgo a los riñones y sedimentando una cronicidad que llevaría al progreso de la enfermedad renal. También, es importante, en pacientes gerontes, quienes pierden las ganas de tomar agua a veces, sobre todo en estaciones calurosas.

La dieta húmeda (comercial o casera o humedecer alimentos secos) evitan un grado de deshidratación mayor, en aquellos individuos que, por algún motivo presentan una gastroenteritis, poliuria, o situaciones de depleción de volumen.

- Omega 3.- omega 6:

Se encuentran principalmente en los aceites de pescado. Forman parte de la bicapa lipídica en casi la totalidad de las células. Son ácidos grasos esenciales. Concretamente sustituyen parcialmente al acido araquidónico como sustrato para la ciclooxigenasa dando prostaglandinas trienoides, que tiene propiedades mas vasodilatadoras y un tromboxano menos vasoconstrictor, entonces se logra aumentar la reserva vasodilatadora del riñón. Parecerían tener, efecto antihipertensivo, también. Disminuyen la producción de citoquinas, factores de crecimiento, moléculas de adhesión y eicosanoides inflamatorios implicados en el daño vascular. Aumentan la producción de óxido nítrico y la relajación endotelial.

- Antioxidantes:

El estrés oxidativo describe un estado de daño causado por los EROS (moléculas que derivan del metabolismo del O2). Existen en todos los organismos aeróbicos.

En el riñón hay predominio de prooxidantes. Un blanco frecuente del ataque de los prooxidantes son los lípidos de membrana de las células renales, ocasionando peroxidación de estos. Esta peroxidación compromete la integridad de la membrana basal y del epitelio, que pueden afectar las funciones de transporte de los túbulos renales.

El glomérulo, es más sensible a la injuria oxidativa, que otros segmentos de la nefrona, sufriendo lesiones inflamatorias o apoptosis.

El estrés oxidativo, también, puede estar involucrado en otras lesiones inflamatorias glomerulares causadas por mediadores (citoquinas), que activan los leucocitos.

Los EROS son promotores de la respuesta inflamatoria de las células mesangiales.

Las lesiones tubulares intersticiales son una constante en la enfermedad renal crónica. La acumulación de macrófagos dentro del espacio intersticial de la corteza tiene un papel importante en la injuria tubular y en el desarrollo de la fibrosis, llevando al progreso de la enfermedad renal.

Los EROS, también, tienen acciones sobre el endotelio vascular, proliferando células musculares lisas y desarrollando hipertensión


Conclusión:

Un tratamiento nefroprotector es la única herramienta que tenemos para trabajar sobre el mejoramiento de la calidad de vida de nuestras mascotas, y se complementa siempre con protocolizar complementarios y acciones clínicas que nos permitan un diagnóstico precoz de la enfermedad renal.

Entendiendo que cuanto antes se intervenga, enlenteceremos la progresión de la patología renal. 

Agradecemos la colaboración para la publicación de este artículo a: Veterinaria Andrea Visintini. - Especialista en DP – ANBA - Esp. Nefrología – CPMV - Esp. Clínica Médica de Pequeños Animales - UBA - Docente Facultad de Ciencias Veterinaria - UBA - Docente del Servicio de Nefrología – Hospital Escuela Veterinaria - UBA - avisintini@fvet.uba.ar


Bibliografía:

- Castillo, R; Huerta, P; Carrasco, R; Rodrigo, R, Estrés Oxidativo y daño Renal. Art. de Revisión. CIMEL 2003, Vol.8, N°1.

- Hernández, D; García, A; González, M; Rufino, M; Torres, A. Eficacia de los ácidos grasos omega 3 en las enfermedades renales: ¿está justificado su empleo? Nefrología. Vol.25.N°3,2005.

- Polzin. Evidence-based step-wise approach to managing chronic kidney disease in dogs and cats. JMedEmCa 23(2)2013, pp205-215.




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